PUNTOS DE BUCEO
¿Dónde podemos bucear?
Desde Palamós tenemos la posibilidad de sumergirnos, sin largos tiempos de navegación, en una gran cantidad de puntos, algunos de reconocimiento internacional por su gran atractivo y biodiversidad.
Estos son algunos de los lugares donde solemos bucear habitualmente :
Se trata de un remolcador hundido de 40 metros de eslora, en muy buen estado de conservación, que durante la segunda guerra sirvió bajo pabellón Alemán. Después de muchos años y una larga historia, gracias a la iniciativa de buceadores locales se consiguió que el buque fuese hundido como punto de buceo y biotopo en la zona.
El Boreas, a pocos minutos de navegación desde Palamós, se ha convertido en uno de los puntos de buceo más conocidos de la zona, sirviendo de refugio a brotolas, congrios y langostas, amigos de agujeros y grietas, así como de nudibranquios y multitud de peces que habitan y rodean el casco del buque.
A una milla al frente del Cap de Planes, al norte de Palamós, se levanta un conjunto de islotes de poca altura y roca granítica.
Las Illes Formigues han representado un obstáculo a tener en cuenta para barcos de gran calado, pues sus bajos forman rocas de vela, ocultas por las olas para los navegantes despistados.
Gracias a estos islotes y bajos, se forma un entramado amplios pasillos subacuáticos, que nos permiten hacer un recorrido diferente en cada inmersión.
Todas las paredes orientadas al noreste están cubierta de gorgonia roja con peces alevines y castañuelas, creando un bonito paisaje.
Especies como morenas, pulpos, escórporas y multitud de nudibranquios son fácil de encontrar en las grietas de les Formigues.
Se conoce como Els Ullastres un impresionante conjunto formado por tres montañas submarinas, frente al pueblo pesquero de Llanfranc, que van aumentando en profundidad según se alejan de la costa.
Els Ullastres, se encuentran en mar abierto, por lo que nos permite disfrutar de bancos de espetones y grandes dentones que vienen a cazar. Solo con rodear estas auténticas montañas sumergidas disfrutarás de un increíble paisaje subacuático.
Pulpos, morenas, doradas, sargos, meros, y depende de la época, peces de San Pedro, pueblan este bonito punto de buceo.Todas las paredes de la parte noreste, desde los 12 metros hasta perderse en el azul, están tapizadas por gorgonia roja, una imagen para recordar.
La Llosa es gran extensión rocosa situada a menos de una milla del Puerto de Palamós.
Se trata de una inmersión con muchas posibilidades, pues ofrece la opción de visitar parte de la Llosa en un buceo de largo recorrido, o hacer una inmersión con menos desplazamiento, buscando por sus paredes, llenas de agujeros y grietas, pulpos, morenas, congrios, multitud de escorporas y cabrachos.
POdemos asomarnos a alguna de las cimas de La Llosa, donde se forman pequeños acantilados, para observar el paso de predadores como espetones, dentones o doradas, y pasear entre pasillos de recubiertos de madreporas amarillas, que aportarán un bonito contraste a nuestro camino.
Para los más aventureros cabe la posibilidad de ir a buscar el Cairo, un pecio cercano, cuyos restos se encuentran a una profundidad de 35 a 38 metros, o incluso visitar el Boreas en una larga inmersión.
En esta inmersión nos encontramos con una gran roca sumergida, perfecta para hacer un buceo tranquilo, facil y divertido, donde poder relajarte con la orientación para simplemente rodearla .
La Roca Roja, baja de los 5 a los 30 metros y está orientada hacia el este desde la costa. En la punta de mar abierto, destaca una bonita pared cubierta de madrepora amarilla, espetones y dentones, que también visitan la parte menos profunda. En su multitud de grietas habitan pulpos, morenas y congrios. Otros animales como castañuelas, escorporas y nudibranquios son fáciles de observar en la superficie de la roca.
Conocido por los navegantes como la Llosa de cala Nova, cerca de la costa de Tamariu, frente aigua Xelida, se extiende una formación compuesta por tres grandes barras paralelas y bien diferenciadas, LOs Canons de Tamariu, que a los buceadores nos permiten el paso entre ellos hasta su base
Un buceo donde las gorgonias nos acompañarán durante todo el camino, y que en la parte más superficial, bancos de sargos, lábridos y escorporas son fácil de encontrar.
Hablamos de nuestra calita privada, la cala del Frare Damia y la isla de la Galera, situada en el bajo del faro de Palamós con un acceso muy cómodo a pie desde el centro de buceo.
Una cala a resguardo de fuertes vientos, con una pendiente muy progresiva, sobre un fondo rocoso, dibujando entretenidos canales que harán cada buceo diferente.
Podemos encontrar muchas grietas y agujeros donde se esconden langostas, pulpos, escórporas y diversidad de crustáceos. Grandes bancos de salpas nos acompañan durante los primeros metros, donde también es fácil observar peces como sargos y doradas, o tratar de identificar nudibranquios y caballitos de mar.